3er Foro

 La profundidad de los tipos de capital

De Anda Jiménez Rocío

Pantoja Soto Flor Jael

Rodríguez Vargas Sergio Andrés

Valdes Gutierrez Luis Enrique

Diferencias entre capitales


Además de los capitales mencionados en el cuadro, se puede mencionar al capital humano que por su parte, al hablar de otro tipo de capital como lo es el humano, regresamos a la visión economicista en la que se habla de un gasto, o mejor dicho, de un proceso de costo-beneficio en el que se valoriza cuánto se debe invertir o destinar a la preparación de profesionales o de mano de obra. Es así que entonces podemos hablar de la creación de condiciones de reproducción y mantenimiento de un sistema, apegado a valores y tradiciones.

El Centro de Estudios Espinosa Yglesias es una asociación civil sin fines de lucro, apartidista, establecida por la Fundación Espinosa Rugarcía, cuya misión es generar conocimiento especializado, transformarlo y difundirlo para impulsar políticas y acciones de envergadura que favorezcan la movilidad social en México y el bienestar socioeconómico en nuestro país.

Su objetivo es ser el referente en la conformación de las principales directrices de políticas y acciones para impulsar la movilidad social en México y el bienestar socioeconómico en el país y realizar investigación de alto nivel cuyos resultados se difundan, para informar e influir a la opinión pública y a los responsables del poder público con el fin de que tomen las mejores decisiones en favor de los mexicanos.

De la movilidad social

La movilidad social es el cambio en la condición socioeconómica de las personas. La movilidad social es un reflejo del nivel de igualdad de oportunidades entre la población: a mayor igualdad de oportunidades, mayor movilidad social. Por su parte, en México es baja y se concentra de manera significativa entre las personas que nacen en situación de pobreza. Lo anterior significa que no logran superar su condición de pobreza.

Para resolver este problema se requiere garantizar la igualdad de oportunidades. De hacerlo, habrá una mayor justicia social en México, una sociedad más integrada y una economía próspera.

 

La educación en México muestra una mejoría en términos absolutos, como en el caso del grado promedio de escolaridad o el analfabetismo, los retos que enfrenta el sistema aún son importantes.

Se puede argumentar que, aun cuando el acceso a la educación ha mejorado, la calidad de la misma ha disminuido y su influencia en la ocupación o el ingreso sería mínima. Esto apunta a que la situación de la demanda laboral es la que tiene influencia sobre la educación, afectando a las decisiones de las personas para invertir en su educación al no ver recompensado de manera equitativa el fruto de sus esfuerzos.

La educación es considerada como uno de los factores que posibilitan la movilidad social, a través de ella las personas no solo se desarrollan intelectualmente, sino también adquieren conocimiento y herramientas que les permiten ejercer plenamente otros derechos y libertades, lo que en conjunto les facilita integrarse al mercado laboral de manera satisfactoria y así alcanzar un nivel económico diferente al de su hogar de origen.

En México la cobertura educativa ha aumentado en los últimos años, sin embargo, la oportunidad de acceder a la educación no es igual para todos. Por una parte, la calidad y oferta educativa a nivel regional son unas de las limitantes para el acceso y el logro educativo: las regiones más urbanizadas tienen una mayor concentración de escuelas y diversidad de oferta educativa, a diferencia de las regiones rurales con una menor disponibilidad de escuelas en distintos niveles educativos; mientras que el desarrollo económico de las entidades federativas del país impacta no solo en la infraestructura de las escuelas, sino también en la calidad de la educación que ofrecen.

 

El género, el color de piel y la riqueza se convirtieron en estereotipos que castigan las oportunidades de las personas y obligan a las personas a que su posición económica inicial sea también su posición final. Las mujeres son el grupo que más se enfrenta a estos problemas. Resulta sorprendente que su situación de discriminación viene desde distintos ámbitos: su hogar, las escuelas y el mercado laboral.

El trabajo de cuidados representa un obstáculo para que las mujeres puedan desarrollar todo su potencial. Si existe una mala distribución del tiempo entre mujeres y hombres, dándole la mayor carga a las mujeres con base en estereotipos de género, se convierte en una circunstancia que reduce las oportunidades de entrar al mercado laboral o de aumentar su capital humano.


Para poder hablar más concretamente de esto, exponemos la situación de los jornaleros en México, 5.5 millones de personas están ocupadas en actividades agrícolas, de las que una pequeña parte son reconocidas como población jornalera (ENIGH, 2015): La mayoría de ellos no posee un registro ante el cual puedan responder, no poseen prestaciones laborales, se compone por una  población migrante y de competencias agrícolas, además de que no muchos llegan a poseer un ingreso seguro debido a la falta de contrato o contratos con pésimos términos para los trabajadores, sin mencionar que la mayoría poseen un nivel de escolaridad bajo, que como máximo alcanza la primaria.

A primera vista esto puede parecer insignificante, sin embargo, la importancia de esto reside en la información que revela, pues incluso la situación laboral rebasa los márgenes de la igualdad y legalidad ya que este grupo se compone de jóvenes y hasta incluso menores de edad, que se ocupan en el campo antes de atender una formación educativa.


La movilidad educativa se ve frenada por diferentes factores, entre los que destacan las condiciones socioeconómicas del hogar de origen y el rezago educativo de los padres. La combinación de estos y otros factores afectan particularmente el desempeño de la población estudiantil en el nivel medio superior.

De los más de cinco millones de estudiantes inscritos en alguna de las modalidades de la educación media superior para el ciclo escolar 2016-2017, más de un millón abandonaron sus estudios o no cumplieron con los requisitos para aprobar un grado escolar. El efecto acumulativo de esta situación en este y otros ciclos escolares es que menos del 60% de los jóvenes mexicanos en edad de terminar la educación media superior alcanzarán dicho nivel, reduciendo de manera drástica su cobertura.

Los datos de la Encuesta ESRU de Movilidad Social en México (EMOVI) 2011 indican que el 60% de las personas con padres sin estudios terminan la educación primaria como máximo, mientras que el 97% de aquellos cuyos padres cuentan con educación profesional terminan por lo menos la educación media superior. Gracias a esta dimensión de movilidad social, podemos profundizar en el conocimiento de las causas de la desigualdad, especialmente si tomamos en cuenta que, en México, la educación de los padres determina en buena medida los logros educativos de sus hijos.

Cuando el acceso a la educación se ve restringido por las condiciones de riqueza del hogar de origen, las brechas de desigualdad se amplían y favorecen a aquellos que se encuentran en los niveles socioeconómicos más altos, las diferencias son notorias: las probabilidades que tiene una persona que proviene del estrato más bajo para ingresar a la educación superior son 18 veces menores que las de alguien que proviene del estrato superior.

Estos problemas están asociados, entre otras causas, al bajo desempeño de los estudiantes en los niveles previos y a las presiones para incorporarse al mercado laboral. En lo que se refiere al desempeño, las condiciones de marginación son un elemento clave que explica los bajos resultados en los exámenes estandarizados de evaluación: a menores ingresos, mayor abandono escolar. En el caso específico de las condiciones de la educación y el trabajo en México, vemos que la deserción escolar, la carencia de capacitación, la baja movilidad intergeneracional y las características del mercado laboral son problemas que necesitan solución a corto plazo. El estrecho vínculo entre la dimensión educativa y la dimensión laboral hacen que las políticas públicas para ambas deban integrarse e implementarse de manera conjunta y coordinada.

La educación por sí misma no puede impulsar el crecimiento de la economía si no existe un mecanismo que la complemente, le dé pertinencia y la haga redituable. Las políticas públicas deberán ocuparse de eliminar la desigualdad del retorno educativo en el mercado laboral, en el entendido de que la educación va más allá del simple logro en ingresos o demanda de trabajo y de esta manera conseguir que la educación en México sí tenga una influencia positiva en la ocupación.

Lo que se aprende en la familia es fundamental para la escuela. Aquí se desarrollan tanto las actitudes y valoraciones respecto del saber como las actitudes básicas para tener éxito en los estudios. Lo más importante que se aprende en la familia es la relación con la cultura y el conocimiento(Tenti,2018,p.75).La escuela y la familia son las dos grandes instituciones educativas de las que disponen los niños y niñas para construirse como ciudadanos.

La relación entre escuelas y familias, es porque ambas instituciones de socialización son primordiales para la crianza, cuidado y educación de los niños y niñas, aunque se debe reconocer que, en las sociedades modernas, desde hace algún tiempo, no son las únicas que les hablan, estimulan y brindan información. Un buen ejemplo, es el lugar que ocupan los medios masivos de comunicación y las nuevas tecnologías, que en forma cotidiana, y bajo propuestas atractivas, captan la atención de niños y niñas durante horas.

La educación es un derecho para las niñas, niños y jóvenes en México, esta es una herramienta que les facilita el acceso a mejores niveles de bienestar, en un momento dado, mayor que el de sus padres. Sin embargo, a partir de la segunda quincena de marzo de 2020, las actividades académicas se detuvieron de manera abrupta por la pandemia de la covid-19. El Gobierno Federal no atendió a tiempo el problema de salud y día a día esta situación se ha complicado.

Durante esta «cuarentena», las y los estudiantes han realizado sus actividades académicas utilizando las herramientas tecnológicas a su alcance. Sin embargo, todavía no tenemos datos del impacto en el aprovechamiento y aprendizaje que las y los jóvenes obtuvieron; así como del incremento en la brecha de desigualdad entre ellas(os). Hemos escuchado diversas historias, cada una en contextos diferentes, pero todas con algún grado de desigualdad y de discriminación haciendo evidente la inmovilidad social.

Como a todas(os), a las y los docentes la pandemia nos tomó desprevenidos; por un lado, la incertidumbre de la enfermedad y, por el otro, el desconocimiento o escaso uso de varias herramientas tecnológicas. En algunos casos por la desidia de las y los maestros de no querer utilizar la tecnología debido a la resistencia al cambio. Pero lo tuvieron que hacer y al final cumplieron. Por su parte, a los padres de familia son actores importantes en el escenario de la pandemia les tocó hacerla de mamá, papá y de maestros, comprendiendo el compromiso de las y los docentes en la educación de sus hijas(os).

Es necesario planear de manera puntual la impartición de clases tanto a distancia como presenciales, «sistema híbrido»; ahí está la oportunidad de darle un giro a la educación y potencializar el uso de la tecnología. Resulta indispensable buscar estrategias para que no se incremente la desigualdad y que ningún estudiante se quede fuera. Los planes y programas se tienen que orientar a los aprendizajes locales y regionales donde las y los jóvenes estudiantes conviven; además, se tienen que orientar a las empresas para saber y conocer sus necesidades.

En términos de carencias sociales, el mayor cambio entre 2018 y 2020 es un aumento de 12.0 puntos porcentuales en la carencia por acceso a los servicios de salud, que pasó de 16.2% a 28.2%. Otras carencias que aumentaron en menor medida son el rezago educativo con un incremento de 0.25 puntos porcentuales y la carencia por acceso a alimentación nutritiva y de calidad (0.31 puntos porcentuales).

El espacio de los derechos sociales permite conocer cuántas y cuáles son las carencias que padecen las personas. Los indicadores de carencias sociales empleados para la medición de la pobreza identifican elementos esenciales del derecho, sin los cuales las personas no podrían ejercer los derechos sociales definidos en el artículo 36 de la LGDS. Entre 2018 y 2020, el número de carencias promedio de la población en situación de pobreza pasó de 2.3 a 2.4. En el caso de la población en situación pobreza extrema, el número de carencias promedio se mantuvo en 3.6.

Rezago educativo: Entre 2018 y 2020, el porcentaje de la población con rezago educativo se mantuvo en niveles similares, al pasar de 19.0% a 19.2%, lo que representa un aumento de 23.5 a 24.4 millones de personas durante este periodo, es decir, 0.9 millones de personas. Por entidad federativa, 18 de las 32 entidades presentaron aumentos en este indicador, siendo Michoacán (27.0% a 29.4%), Puebla (21.3% a 23.2%) y Sonora (14.0% a 15.6%), las tres entidades con mayores incrementos. Por otra parte, 13 de las 32 entidades presentaron una disminución en este indicador, siendo Morelos (19.3% a 17.7%), Tabasco (18.0% a 16.6%) y Sinaloa (17.9% a 16.8%) las entidades que presentaron la mayor disminución. Mientras que Oaxaca se mantuvo en el mismo nivel que en 2018 (29.6%).

Ante el aumento en el rezago educativo, especialmente en población más joven, y la expansión del mandato de obligatoriedad a la educación media, reflejado en el nuevo umbral de la carencia por rezago educativo, es prioritario fortalecer los programas que buscan disminuir el abandono escolar, así como generar las condiciones necesarias para promover la asistencia y conclusión de la educación obligatoria.

Conocimientos prácticos frente al prestigio de la cultura institucional

La película “Parásitos”  presenta la situación de la familia Kim, ésta de una estrato económico bajo y sin ser el tema principal de la película, muestra de manera breve el choque que a menudo se sufre entre los conocimientos prácticos aprendidos en nuestra realidad inmediata contra el prestigio y legitimidad que representan los títulos (cultura interiorizada). Esta situación se puede ver en la película desde conocimientos propiamente integrados a un sistema educativo (Con el hijo Ki-woo quien al comienzo se establece que tiene dominio del Inglés, pero carece de un título que lo avale), hasta el contraste de los conocimientos formales frente a los aprendizajes y estrategias que la familia entera demuestra, desde las habilidades sociales, a aspectos mucho más concretos como el propio uso de la computadora para falsificar títulos.

La película hace énfasis en estos elementos para realizar una distinción hacia la familia Park, esta adinerada y educada en un sistema formal de enseñanza. Esto se hace porque la narrativa de la película  destaca a la familia Kim como inteligente y capaz, pero fuera de los marcos normativos que la institución educativa considera propios para una persona. De igual modo ésto se observa en los valores que tienen, la cual impone a la familia y la superviviencia del día a día como los ejes centrales y para ello, sus perspectivas de la honestidad o de la solidaridad difieren de la forma en la que se trata de inculcar activamente en los programas escolares. 


La película hace buen ejemplo de las observaciones de Bourdieu ya que se muestra las habilidades y saberes de la familia Kim como de carácter empírico, fruto de la experiencia y sumamente arraigados a la clase social a la que pertenecen.

El ejemplo anterior resulta ilustrador referente a la relación de los saberes adquiridos en la familia y los grupos sociales de la realidad inmediata frente a los escolarizados. Como explica Tenti, los programas escolares no se generan de forma arbitraria en sí, sino que se les da forma a partir de los cúmulos explicativos científicos a través de la visión capitalista de eficiencia y efectividad. Estos criterios resultan de gran importancia para discriminar y estructurar el contenido que se dará en las escuelas, este procedimiento como se observa, no puede ser objetivo, y por tanto involucra enormemente los valores y formas de ver el mundo más imperante en las comunidades intelectuales, políticas así como de las demandas económicas. La situación, como ya puntualizó Giddens, genera una diferenciación entre los saberes que enseña de los de actores que se hallan en realidades muy distintas los que diseñan estos programas.

Como se vio en el foro pasado esto se puede observar en el nivel de la reproducción cultural pero de igual manera se genera en un nivel consciente donde actualmente se piensa como mejor o ideal generar determinados valores y saberes, pero también del desconocimiento de otras necesidades ya sea de clase, de género, de neuro divergencia, etc.


Populismo


Uno de los aspectos más importantes en el entorno político es el de recoger las demandas de los diversos grupos sociales, esta cuestión sin embargo representa un reto constante, no solo por el propio sistema de carácter representativo en el que los círculos políticos se separan de los sociales y toman la intención de interpretar, estructurar y responder a las cuestiones bajo la visión del propio sistema en el que opera, lo que ocasiona que en realidad no sean las demandas sociales per-se las que se tomen sino una adaptación que ha pasado por un filtro del propio entendimiento de mundo de los estratos políticos (Tenti explica esta idea como el riesgo de pensar “lo que los sectores populares pensarían si fueran intelectuales” lo cual es una contradicción).

El populismo parte de la idea de la posibilidad de representación, y en términos de conocimiento sostiene la idea de un valor igualitario entre todos los tipos de conocimiento culturales, pero en esto, se ignora el capital cultural que como ya hemos visto, está inserto en una realidad social donde determinados conocimientos son los dominantes y otros son desestimados o ignorados. Es decir, “Se da una indiferencia de las diferencias”.


Uno de los mejores exponentes en este sentido son las políticas educativas que se han desarrollado en las zonas rurales, donde incluso cuando se hacen intentos por conocer las necesidades de los contextos propios, los resultados y soluciones se esperan en mayor o menor medida lograr una integración de estas comunidades a los modelos económicos y políticos de los planes nacionales, lo que en sí ya crea un conflicto al obligar de forma implícita, la reconfiguración de valores y saberes no compaginables con el sistema capitalista y la visión individualista.


Sin embargo el caso contrario también sucede, ya que las propias comunidades son conscientes de la realidad en la que están insertos y a menudo buscan activamente que las nuevas generaciones logren adquirir conocimientos poderosos que les permitan sobrevivir y mejorar sus condiciones de vida lo cual de igual manera puede chocar con determinadas políticas que buscan encapsular a estas comunidades como si fuesen exponentes de museo para mostrar y no tocar, ignorando que incluso en estas hay cambios en sus visiones de vida, aun si estos son menos percibidos.


Presentismo en los programas escolares


Zigmund Bauman a través de su análisis de corte marxista y retomando a Weber, realiza una crítica del enfoque cultural de las sociedades Posmodernas bajo el sistema capitalista en el que a diferencia de comunidades tradicionales que se orientan al pasado, y las sociedades modernas positivistas que se orientan al futuro, estas se orientan a un presente perpetuo. La situación es un resultado de los cambios acelerados que fuerzan a las personas a adaptarse a los cambios constantes. El aspecto tecnológico resulta uno de los mejores exponentes para observar esta situación así como la lógica del sentido común de la obsolescencia, ya que muchos aparatos se ven rápidamente sustituidos y reemplazados por nuevos más eficientes o de mayor capacidad. 

Tenti visualiza esta situación aplicada en el campo del conocimiento escolarizado donde la misma idea de obsolescencia prevalece y resulta un factor decisivo para la elaboración de los programas escolares. La visión tecnocrática impulsa la idea de la productividad y por lo mismo prioriza el la enseñanza técnica de los conocimientos. Esto provoca una desconexión entre los saberes enseñados de los contextos que han dado formación a esos mismo saberes (sobre todo en las ciencias “duras” como la química, biología, física y demás). El resultado es de carácter  paradójico con el propio propósito innovador que se trata de inculcar, ya que como se explica, no se puede crear algo de la nada. 


Hay otro efecto que puede observarse, sobre todo en el nivel básico con relación en esta postura presentista, y es la de la separación de los conocimientos, que se estructuran y apartan entre sí como entes distintos uno de otro dificultando a los alumnos el poder entrelazar lo aprendido en las materias y elaborar redes de entendimiento sobre la realidad. 


Este presente año se realizó una reformación en los textos de estudio gratuitos que entre las múltiples críticas que se han realizado al modo en que se hizo, se agrega el cómo de fondo, parte de esta visión atomizada del conocimiento donde la elaboración de las distintas materias solo corresponden a ellas mismas y aunque se hayan agregado nuevas materias con una perspectiva humanística, esto se hace desde esta misma separación artificial y por tanto, complica la  asociación de estos elementos con el de las demás materias, y esto no se da por una inercia en la forma de desarrollar los libros sino a través de filtros y ediciones que juzgan y estructuran las propuestas para que resulten adecuadas a los criterios que establecen. Por ello, aun si se hacen convocatorias abiertas, realmente no pueden tomar visiones que difieran con las dominantes de cómo estructurar o integrar estos saberes.


Arbitrariedad

La arbitrariedad, concepto desarrollado por Bourdieu y Passeron, refiere a la aceptación de  cómo los elementos que componen a la cultura se han ido desarrollando y no es que hayan existido desde siempre, idea que a menudo se genera a través de la normalización y el aterrizaje de los saberes en el sentido común, Esto cobra relevancia en los propios campos del conocimiento donde hay una lucha constante entre marcos explicativos de imponer una determinada visión y con ellos determinados cúmulos de saberes. 


La manera en la que esto se relaciona con los programas educativos y la visión tecnócrata es que la primera se forma a través de los criterios de la segunda que al encontrarse en los estratos con mayor capacidad económica, también permiten poseer y usar una mayor cantidad de recursos para extender conocimiento así como para producirlo. 


Si bien la cultura se va formando de manera arbitraria, este elemento en la realidad científica logra mantenerse más cohesiva a través de las propias doctrinas de las que parten para producir conocimientos acumulativos: Tenti explica cómo estos saberes son creados por los círculos intelectuales pero no controlados por ellos, ya que son quienes se hallan mejor posicionados en el ámbito económico quienes permiten la reproducción de estos a través de la financiación y la imposición de los objetivos. Es en este aspecto donde se puede ver la conformación de los programas escolares que realizan una discriminación y estructuración intencionada a través de varios criterios en los que se destaca bajo la idea capitalista los conocimientos “útiles” e “inútiles”. 


Sin embargo como ya se ha explicado esta distinción se ha creado a partir de los intereses y las formas de ver de un determinado grupo, por lo que en realidad, el concepto de arbitrariedad sigue presente aunque para algunos, esto se ignore.


Ayotzinapa, el paso de la tortuga


Para este foro también nos gustaría ejemplificar con un pequeño documental que se encuentra en Netflix el cual describe los hechos ocurridos en Iguala en el año 2014.


Una noche llena de incertidumbre y miedo por parte de los  estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa que se dirigían  hacia la Ciudad de México, lo ocurrido ese día aún sigue siendo incierto. Los mismos estudiantes que sobrevivieron  narran lo ocurrido, en el documental se muestra un mapa para poder visualizar el recorrido que hicieron los autobuses y el momento en el que fueron interceptados por camionetas que les empezaron a disparar a los autobuses  al mismo tiempo que bajaron a unos cuantos  estudiantes, ellos lo único que decían es que solo eran estudiantes.


El ejército buscaba a los estudiantes sobrevivientes debido a que los consideraban como delincuentes, los mismos compañeros con piedras marcaron los casquillos que se encontraban tirados en el piso. Los sobrevivientes  sentían temor  porque las patrullas se encontraban haciendo rondines y los alumnos buscaron refugiarse en casas cercanas al lugar donde ocurrieron los hechos. No tenían cómo comunicarse con sus familias.


En total los camiones que llevaban a los estudiantes eran cinco y de esos, dos camiones desaparecieron por completo y ahí era donde se transportaban los 43 estudiantes desaparecidos.


Los familiares de los estudiantes desaparecidos preguntaban por sus hijos y en ese momento se buscaba hacer justicia, haciendo  marchas con fotos, letreros y consignas "vivos se los llevaron, vivos los queremos". La impotencia se apodera de las familias y comienzan a poner plazos para que les den una respuesta. Los hechos ocurridos en Iguala causan solidaridad con estudiantes de otros países que exigen justicia para los 43 desaparecidos.


41 días después Jesús Murillo Karam procurador menciona que “el Jona” , “el pato” y  “el chereje”  eran los involucrados en llevarse a los 43, se  los llevaron a un basurero y los quemaron por ordenes “del terco”. El basurero se encontraba en  Cocula, los peritos consideraban que era imposible quemar a  tantas personas en un basurero y sin  que nadie se diera cuenta.


Los normalistas no fueron a boicotear algo político, ni tampoco tenían que ver con el crimen organizado, solo se dirigían a la Ciudad de México para conmemorar lo ocurrido con los estudiantes de 1968 . Todos los desaparecidos eran estudiantes y a los sobrevivientes se les exigió después un  certificado adicional de no delitos. Los hechos ocurridos surgieron dentro de la candidatura de Enrique Peña Nieto, el gobierno  mostró indiferencia sobre el caso de los 43 desaparecidos y encubrió  a los responsables. 


Una estudiante menciona esto: "Ser normalista es más peligroso que ser un delincuente” debido a que nos llaman bandalos y sin queaser. "México tiene que despertar primero y se tienen que mejorar las cosas que están mal, no se puede hablar de mejorar a un país mientras exista el terrorismo". Estudiante: "Queremos cambiar el lugar donde estamos, nosotros no olvidamos ni tampoco perdonamos".

Vale la pena recordar la situación de Ayotzinapa ya que en aspectos sociales nos hace una llamada de atención a la valorización de la educación, que incluso hace una forzada vuelta en U debido a que traiciona los ideales por los cuales nace: hacer accesible y de alcance una educación para todos. Pero ¿Cuál es la razón de la represalia? La respuesta es sencilla pero a la vez complicada: sus planes o programas educativos ya no responden a la agenda política del país. Los ideales por los cuales han nacido ya no tienen cabida, hasta incluso se consideran como indeseables y no es de extrañar, pues hasta históricamente la Normal Rural de Ayotzinapa ha instruido a figuras revolucionarias como Lucio Cabañas y Genaro Vázquez Rojas que han sido líderes de movimientos revolucionarios.

Entonces, la razón se vuelve una persecución política. La política se inmiscuye en la esfera de la educación pero con los tintes de la política tradicional, institucional, normativa e inmutable. La escuela pasa entonces de ser una institución educativa a una herramienta estatal, pues antepone los proyectos y necesidades empresariales (y de producción de capital humano) antes de responder a las necesidades sociales de la población para mejorar su situación socioeconómica, pues se prepara de manera discreta suficiente mano de obra, apenas cualificada para ser contratada. La certitud de esto es la existencia de contratos laborales precarios, basta regresar a la presencia de los jornaleros en México: La Ley solo estipula los períodos ante los cuales pueden ser reconocidos como tales pero no hay ningún apartado con el que se garantiza un salario equivalente al desempeño de sus actividades, dando como resultado que exista paga por destajo, por tiempo, por duración (temporada) o por tipo de trabajo.


Fuentes

  • ENIGH https://bit.ly/2PUwJoq
  • http://blogdeeduc-preescolar.blogspot.com/2016/06/relacion-existente-entre-la-familia.html
  • https://ceey.org.mx/
  • https://ceey.org.mx/educacion-y-movilidad-social-en-tiempos-de-la-covid-19/
  • https://ceey.org.mx/la-educacion-en-mexico-y-su-influencia-en-la-ocupacion/
  • https://mx.boell.org/es/2019/04/22/la-vida-en-el-surco-jornaleros-agricolas-en-mexico
  • https://www.coneval.org.mx/SalaPrensa/Comunicadosprensa/Documents/2021/COMUNICADO_009_MEDICION_POBREZA_2020.pdf

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